Aerotermia con radiadores: Tipos, precio e instalación
La aerotermia con radiadores es un sistema que aprovecha la energía del aire exterior para proporcionar calefacción y agua caliente sanitaria. Al combinar aerotermia con radiadores, ya sean convencionales o de baja temperatura, se distribuye el calor de forma uniforme en la vivienda, mejorando el confort de la calefacción diaria.
Los radiadores de baja temperatura pueden ser algo más caros, pero permiten instalar una máquina de aerotermia de menor potencia y mayor eficiencia, reduciendo el consumo en calefacción y mejorando el rendimiento del sistema. Esta compatibilidad entre aerotermia y radiadores es especialmente interesante cuando se busca maximizar el ahorro a largo plazo sin renunciar al confort.
De cara a la instalación, sobre todo en reforma, es posible aprovechar gran parte de la instalación de radiadores anterior con poca o ninguna modificación, lo que abarata el precio inicial. El ahorro puede rondar los 3.000 euros si se conservan los radiadores actuales, y situarse entre 1.500 y 2.000 euros si se sustituyen únicamente los más deficientes por modelos más actuales optimizados para calefacción con aerotermia.
Con el uso de turbofans, se acelera el intercambio de calor y se alcanza antes la temperatura de calefacción deseada. La energía final será la misma (la vivienda mantiene unas pérdidas térmicas que cubrir), pero con estos accesorios la respuesta del sistema mejora y la aerotermia con radiadores resulta más ágil en el día a día.
Contenido
- ¿Qué es la aerotermia con radiadores?
- ¿Qué tipos de radiadores para aerotermia hay?
- ¿Cuál es el precio de la aerotermia con radiadores?
- ¿Cómo funciona la aerotermia con radiadores?
- ¿Qué diferencias hay entre la aerotermia con radiadores y una caldera de gas?
- ¿Cómo se instala la aerotermia con radiadores?
¿Qué es la aerotermia con radiadores?
La aerotermia con radiadores es un sistema que extrae energía del aire del exterior mediante un circuito de gas comprimido para calentar un circuito de tuberías y radiadores que compensan las pérdidas de calor de la vivienda.
Un radiador es un emisor de calor diseñado para disipar el calor de su interior a una habitación. Los radiadores generalmente transfieren calor por convección, radiación o una combinación de ambas, aprovechando un fluido interno, como agua o aceite térmico, que circula a través de su estructura. Un radiador no deja de ser un intercambiador de energía, y como el calor se transmite siempre hacia el frío, cederá el calor del fluido de su interior al aire circundante.
¿Qué tipos de radiadores para aerotermia hay?
Los tipos de radiadores para aerotermia son de baja temperatura, de alta temperatura, y según su material de construcción, de aluminio y hierro fundido. Dentro de lo simples que son los radiadores, según cual tengamos, deberemos elegir la máquina de aerotermia adecuada, tanto si es monobloc o bi-bloc o el gas que use. En el caso iDM energie, serán las AERO ALM, monobloc y con gas refrigerante R290.
Radiadores de baja temperatura
Los radiadores de baja temperatura son los más aptos para trabajar con aerotermia, porque suelen trabajar entre 35ºC y 55ºC, y no es raro que estén fríos al tacto en según qué situaciones, ya que la temperatura corporal puede ser mayor. Son los radiadores más eficientes, ya que funcionan con una temperatura de impulsión entre el agua y el ambiente muy similares.
Los radiadores de baja temperatura pueden necesitar un tamaño mayor que los de alta temperatura para mejorar la disipación.
Radiadores de alta temperatura o convencionales
Los radiadores convencionales o de alta temperatura trabajan entre los 65ºC y los 80ºC y gracias a los equipos modernos de aerotermia de calidad no hace falta cambiarlos por unos de baja temperatura al reemplazar una caldera antigua. En este caso estamos sacrificando algo de eficiencia, debido a la gran diferencia entre las temperaturas exterior y la de impulso pero hay lugares donde no se puede eliminar unas estrechas tuberías de calefacción o los propios radiadores, como en reformas.
No suelen usarse para refrigeración, por eso en verano no funcionan y la máquina sólo funciona para agua caliente. Hay poca experiencia con su uso combinado con turbofans dado que son elementos relativamente nuevos en el mercado.
Radiadores de aluminio
Estos emisores de calor están fabricados con un material ligero y fácil de trabajar como el aluminio, que no se oxida, disipa 5 veces mejor el calor de su interior que los de hierro, por lo que su tamaño es más reducido y acepta diseños más modernos que favorecen la convección del aire caliente, por lo que calientan antes una habitación.
Los radiadores de aluminio de calidad suelen tener un tratamiento que evite la corrosión y pueden ser algo ruidosos al inicio del ciclo de calentamiento.
Un radiador de aluminio de 10 elementos y una altura de aproximadamente 60 cm puede cortar alrededor de los 100 euros.
Radiadores de hierro fundido
En el caso de los radiadores fabricados de hierro fundido (o acero), las pocas ventajas que tienen son su diseño retro y que tienen una gran inercia térmica, esto es, que una vez apagado el sistema de calefacción siguen estando calientes por más tiempo que los de aluminio. Como la aerotermia no debe tener arranques y paros, si no funcionar continuamente, este no es un factor importante.
Son menos eficientes que los de aluminio, más grandes y pesados, proclives a la oxidación, y duran décadas funcionando sin tener que quitar los depósitos de su interior. En la actualidad se ha dejado de lado el hierro en favor del acero, de características similares.
Hay en el mercado radiadores de hierro de estilo elegante muy vistosos y de corte victoriano por cerca de 700 euros o con estilo más moderno por 150 euros.
¿Cuál es el precio de la aerotermia con radiadores?
Para un piso medio de 100 m2 el precio de una instalación de aerotermia con radiadores está entre los 6.000 y los 7.000 euros.
Superficie | Potencia aerotermia. | Precio con radiadores de alta temp. | Precio con radiadores de baja temp. |
100 m2 | De 4 a 6 kW | 6.000 - 6.500 euros | 6.000 - 7.500 euros |
150 m2 | 7 kW | 6.500 - 7.500 euros | 6.500 - 8.500 euros |
El precio final de la aerotermia puede variar considerablemente, ya que si por ejemplo se trata de una reforma, y ya están puestos los radiadores, simplemente hay que hacer un buen diseño, con el modelo y la potencia adecuada. Incluso si son viejos radiadores de hierro fundido o acero, se pueden dejar si se cuenta con una máquina de aerotermia que alcanza temperaturas de impulsión de hasta 75ºC. Según la necesidad de la vivienda se puede optar por una unidad de potencia entre los 4 y los 15 kW térmicos.
¿Cómo funciona la aerotermia con radiadores?
En modo calefacción, se extrae la energía de la atmósfera exterior y se transfiere al interior por medio de radiadores, su construcción metálica, tanto en hierro, acero, o aluminio, les permite ser un perfecto disipador del calor de su interior, aportando energía térmica al interior de la vivienda.
Un radiador típico tiene 4 partes esenciales:
- Tuberías: Transportan el agua caliente desde el sistema de aerotermia a su interior, normalmente de cobre, acero, aunque se están introduciendo nuevos materiales compuestos con polímeros.
- Elementos Radiantes: Superficies metálicas que emiten calor al ambiente, con aletas que aumentan la superficie de contacto con el aire, mejorando el calor de su interior.
- Válvulas: Controlan el flujo de agua y permiten ajustar la temperatura. Manuales o termostáticas, hasta con control en tiempo real de sus datos de paso. Una válvula de purgado es básica para eliminar posibles burbujas de aire que paralicen el paso de agua.
- Carcasa: Protege las partes internas y mejora la seguridad, aporta el estilo exterior de la unidad. El tamaño de la carcasa, define la potencia del radiador.
Un radiador es un emisor, y emite la energía de su interior a la vivienda de dos maneras, por radiación y por convección.
Radiación infrarroja: Una parte del calor se transfiere directamente al ambiente a través de la radiación térmica. Esto ocurre cuando el calor se emite desde la superficie del radiador hacia los objetos y personas en la habitación.
Convección: La mayor parte del calor se transfiere a través de la convección. El aire en contacto con el radiador se calienta, se vuelve más ligero y asciende. Esto crea un flujo de aire que circula en la habitación, distribuyendo el calor de manera uniforme.
Es recomendable que se trabaje con radiadores de baja temperatura. Al trabajar en alta temperatura, el aire asciende antes al techo, donde se acumula, pero no permanece en el suelo, donde se encuentran las personas.
¿Qué ventajas tiene la aerotermia con radiadores?
Los radiadores son un tipo de emisor barato, relativamente sencillo de instalar, sin piezas proclives a fallos y conocidos por la población. De uso esencialmente silencioso, son en muchos casos compatibles con el uso de aerotermia.
En algunos casos hay que poner unos radiadores con una mayor área para permitir la entrega de calor al interior de la vivienda sin tener que recurrir a altas velocidades de impulsión en el circuito que aumentarían su nivel sonoro.
¿Qué desventajas tiene la aerotermia con radiadores?
Antes de decantarse por una aerotermia con radiadores te mostramos algunas de sus desventajas posibles.
- Inversión inicial: Si se instalan desde cero, entre las tuberías y los radiadores el coste total puede aumentar el tiempo de amortización pensado inicialmente. En este caso, se deben instalar radiadores y bombas de calor de baja temperatura.
- Eficiencia reducida: Si se adapta un sistema ya existente, con tuberías estrechas y radiadores de alta temperatura, es de esperar una reducción en la eficiencia del sistema.
- Instalación profesional: El sistema de tuberías debe ser instalado por un profesional, que evite futuros problemas de fugas, vibraciones, sonidos o atascos.
- Uso de espacio: Los propios radiadores roban espacio útil a las estancias, más aún si son de baja temperatura, que necesitan de un área de intercambio mayor que los de alta.
¿Qué diferencias hay entre la aerotermia con radiadores y una caldera de gas?
La aerotermia con radiadores es más eficiente a nivel energético, ya que extrae energía del aire circundante, reduciendo de paso el consumo eléctrico, no genera CO2, y su mantenimiento es muy bajo y sencillo.
Por contra el gas, tiene un gasto para su funcionamiento más económico, aunque dependiente de los mercados extranjeros. La puesta en marcha suele ser más barata que la aerotermia pero sí que genera gases contaminantes y el mantenimiento es más complejo y llegado el caso, peligroso si no se ejecuta acertadamente.
Coste inicial
- Aerotermia con radiadores: Entre 8.000 € y 25.000 €.
- Caldera de gas: Entre 2.000 € y 5.000 €.
Costes operativos (por año)
- Aerotermia con radiadores: Aproximadamente 300 € a 600 € al año.
- Caldera de gas: Aproximadamente 800 € a 1.200 € al año.
¿Cómo se instala la aerotermia con radiadores?
Para instalar aerotermia con radiadores, en primer lugar se realiza una planificación de la instalación, ordenando por donde han de pasar los tubos, abriendo las rozas necesarias si no van por el suelo y protegiendo estas con un corrugado adecuado. Evaluando el espacio disponible, tanto para la unidad exterior, que debe tener un área libre, como de la distribución de las tuberías y los radiadores.
Una vez montado, se debe unir esta unidad exterior con la interior, o el depósito de inercia o de ACS, en un espacio reservado donde poder ejecutar cómodamente un mantenimiento posterior. Las tiradas de tuberías deben tener válvulas de control de flujo, presión, seguridad y ser del mayor diámetro posible.
Tras una inspección y una prueba de estanqueidad se pone en marcha con la asistencia del servicio técnico de la marca y se parametriza adecuadamente. Tras una verificación de la temperatura de impulsión y las curvas de carga, se debe enseñar al cliente final los cambios necesarios para el uso del día a día. Si no se ha hecho así, el cliente debe exigirlo a su instalador.
¿Qué mantenimiento necesita la aerotermia con radiadores?
Una aerotermia bien instalada y de una marca fiable necesita un mantenimiento bastante sencillo, generalmente una revisión y limpieza de filtros, revisión de posibles fugas tanto de gas como de agua y actualizar su firmware de ser necesario.
Una revisión de las bombas, depósitos, el correcto cierre de válvulas y búsquedas de pérdidas suele ser suficiente. Especial énfasis sobre los filtros de partículas y la adicción de uno magnético, que elimina de la corriente los residuos metálicos, y la pasivación de las tuberías para evitar corrosión si se trata de reforma. Si un radiador muestra una temperatura más baja que el resto y no mejora con un purgado, será necesario su vaciado y limpieza interior con un químico que elimine la contaminación y mejore el flujo.
De tener turbofans hay que revisar el correcto giro de los ventiladores y su posterior limpieza.
¿Se puede usar aerotermia y radiadores para climatización?
Si, se puede usar un sistema de aerotermia con cualquier tipo de radiador para calefacción. Preferiblemente los de baja temperatura para poder trabajar por debajo de los 50ºC de temperatura de impulsión.
Para uso como enfriadores no están recomendados, ya que el intercambio de energía, pasando frío al interior de la vivienda no es suficiente para alcanzar una temperatura necesaria.
¿Qué alternativas hay a la aerotermia con radiadores?
Dentro de los emisores de calor compatibles con una aerotermia actual podemos encontrar soluciones como el suelo radiante, que es lo más eficiente, como fancoils de suelo, pared, de techo o por conductos.
Los sistemas actuales están alejándose de los radiadores clásicos, incluso de los de aluminio sobre todo en obra nueva.
Aerotermia con splits
La aerotermia con splits funciona mediante una bomba de calor aire-agua que transfiere la energía térmica del aire exterior a un circuito de agua en el interior, y pueden proporcionar calefacción, aire acondicionado y agua caliente sanitaria, ofreciendo una solución combinada o todo en uno. De necesitar un aporte calorífico mayor, entran en juego los radiadores.
Aerotermia con fancoils
La aerotermia con fancoils amolda el aire de la vivienda más rápidamente que un circuito de calefacción tradicional, tanto de alta como de baja temperatura, ya que cuentan con el aporte de un ventilador, que obliga al aire a moverse antes, pero pueden causar sensación de incomodidad porque crea corrientes indeseadas.
Aerotermia con suelo radiante
La aerotermia con suelo radiante utiliza una bomba de calor para transferir energía del aire exterior y calentar el agua que circula por tubos instalados bajo el suelo. Es la forma más eficiente y cómoda, pero lamentablemente no todo el mundo puede levantar el piso de su vivienda para instalarlo. La solución con radiadores es más que factible, más económica que el suelo radiante y en muchos casos se puede utilizar gran parte de los circuitos existentes.
¿Se pueden combinar los radiadores con otras alternativas?
Sí, se pueden combinar sin ningún problema. No es raro encontrar una reforma donde necesitan dejar los radiadores actuales de alta temperatura y añadir un circuito de fancoils, tanto para calefacción como aire acondicionado.