¿Qué es el revamping fotovoltaico?

En sistemas fotovoltaicos de más de 15 años de vida, el revamping fotovoltaico se trata de recuperar la potencia nominal inicial de una planta fotovoltaica, sin incrementarla. Es una práctica habitual para mantener y mejorar las instalaciones solares existentes que han ido perdiendo parte de su rendimiento con el paso del tiempo. De este modo se incrementa la producción, los ingresos por la energía recibida y la rentabilidad.

¿Como es el procedimiento para realizar el revamping?

El revamping fotovoltaico implica una revisión profunda y la sustitución de componentes obsoletos o degradados (paneles solares e inversores generalmente) por soluciones tecnológicas actualizadas, con el fin de prolongar la vida útil de la planta y aumentar su rendimiento energético.

El proceso de revamping es una oportunidad para integrar módulos de mayor eficiencia, inversores con mejores características de gestión de la carga y sistemas de monitorización más sofisticados.

Revisión y análisis de los equipos:

La aplicación de revamping en una planta fotovoltaica típica comienza con un análisis detallado de la condición actual de los equipos.

Los técnicos responsables de la planta realizan inspecciones y pruebas para evaluar el rendimiento de los paneles solares, la eficacia de los inversores y el estado de conservación de las estructuras de soporte y los sistemas de conexión eléctrica.

Este diagnóstico inicial es crucial para identificar fallos y establecer las prioridades de la renovación.

Selección de los equipos a sustituir:

Una vez evaluada la planta, se procede a la selección de componentes de cara a mejorar el rendimiento, la generación de energía y la rentabilidad:

• En la elección de qué paneles solares comprar, se tiene en cuenta no solo la eficiencia sino también la compatibilidad con la infraestructura existente. Los paneles de silicio monocristalino, por ejemplo, pueden ofrecer un mejor rendimiento.
• Por otro lado, los inversores a comprar deben seleccionarse basándose en las potencia nominal de la planta para estar dentro del rango de la autorización de la planta.
• Elegir comprar estructuras de soporte que deben ser evaluadas para su resistencia a las cargas de viento y su capacidad para soportar el peso adicional de los nuevos paneles, si es necesario.
• Además, la actualización de los sistemas de conexión eléctrica y la incorporación de tecnologías de cableado más avanzadas permiten una reducción en las pérdidas de transmisión y mejoran la seguridad general de la planta.

Otros aspectos a tener en cuenta:

El revamping fotovoltaico no está exento de complicaciones. Uno de los principales es asegurar una compatibilidad entre los nuevos equipos y antiguos.

Además, los cálculos de retorno de inversión deben ser meticulosos, considerando los costes iniciales frente a los ahorros a largo plazo y los beneficios operativos.

Asimismo, las actualizaciones deben realizarse cumpliendo con las regulaciones vigentes, lo que puede requerir una comprensión detallada de los cambios en la legislación energética y ambiental.

Conclusiones:

Mirando hacia el futuro, el revamping promete ser un componente con cada día más peso en la transición energética por el compomente de envejecimiento inherente de cualquier sistema fotovoltaico.

Los materiales fotovoltaicos de próxima generación, los sistemas de almacenamiento de energía más eficientes y los avances en la automatización y la inteligencia artificial abrirán nuevas puertas para la optimización de las plantas solares existentes. Estas mejoras incrementarán la eficiencia y la rentabilidad de las antiguas plantas fotovoltaicas que deseen hacer uso del revamping.